Las bases y protección del derecho contractual

El papel del derecho contractual es crucial tanto en el ámbito civil como en el mercantil, ya que regula las relaciones entre individuos y entidades empresariales. Este conjunto de normas asegura que los acuerdos se cumplan de manera justa y equitativa. Pero, ¿qué sucede cuando una de las partes involucradas decide no honrar lo convenido?

Comprendiendo el derecho contractual

El derecho contractual establece las directrices para la formación, validez, ejecución y terminación de los contratos. Su principal objetivo es brindar seguridad jurídica para prevenir abusos en las relaciones, ya sean comerciales o personales.

Principios fundamentales del derecho contractual

  • Autonomía de la voluntad: Las partes pueden acordar libremente los términos contractuales, siempre y cuando estos no sean ilícitos.
  • Buena fe: Se espera que las partes actúen con honestidad y de manera transparente.
  • Obligatoriedad: Una vez firmado, el contrato se convierte en vinculatorio y debe ser cumplido.
  • Responsabilidad por incumplimiento: En caso de que una parte no cumpla, la otra puede exigir compensación o incluso la rescisión del contrato.

Ejemplo práctico: Retrasos en una reforma contractual

El escenario: Un cliente contrató a una constructora para remodelar su casa en un término de 4 meses. El acuerdo establecía que si el retraso superaba los 15 días, la empresa enfrentaría una penalización económica. No obstante, el proyecto se prolongó más de dos meses, dejando los trabajos incompletos.

Medidas legales: Ante el incumplimiento, el cliente demandó a la empresa exigiendo:

  • Compensación por los costes adicionales en alquiler debido al retraso de la obra.
  • Finalización inmediata de la reforma según lo acordado.
  • Aplicación de la penalización estipulada en el contrato original.

El tribunal falló a favor del cliente, ordenando a la constructora resarcirlo y concluir la remodelación en un tiempo definido.

Consejos para evitar problemas contractuales

  • Redactar con precisión: Es importante especificar claramente plazos, costos y responsabilidades.
  • Incluir penalizaciones por incumplimiento: Disuade a las partes implicadas de no cumplir sus promesas.
  • Buscar asesoramiento legal: Consultar a un abogado antes de firmar documentos importantes.
  • Recopilar medios de prueba: Conservar correos electrónicos, facturas y cualquier evidencia de lo acordado ayuda a sustentar reclamaciones futuras.

El derecho contractual es un pilar que protege tanto a empresas como a individuos asegurando el respeto de los acuerdos. Si enfrentas algún incumplimiento, actuar de inmediato es crucial para proteger tus intereses. Recuerda que en Marimon Assessors en Sabadell, te ofrecemos la asesoría necesaria para asegurar que tus derechos sean resguardados. ¡Contáctanos y defiende lo que es tuyo!

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